En estos días, donde las emociones (tanto positivas como negativas) se intensifican me gustaría profundizar un poco más en este concepto y en sus beneficios.
¿Qué es gratitud? Es asombro, agradecimiento, mirar el lado bueno de un contratiempo… es dar las gracias por lo que tienes, disfrutar y centrarse en el presente: apreciar nuestra vida como es hoy y lo que la ha hecho así. Es definida como: “un sentimiento de asombro, agradecimiento y apreciación por la vida”.
Según la Psicología Positiva, es una de las emociones positivas. Pero hay más, laalegría, laserenidad, el interés, la esperanza, el amor, la diversión, el asombro,lainspiración,etc. Todas ellas tienen una función y es importante entrenarlas y practicarlas.
En posteriores post, seguiré profundizando en ellas.
Martin Seligman (1999), el llamado padre de la Psicología Positiva (PP), la definió como el estudio científico de las fortalezas y virtudes humanas (puedes recordar tus fortalezas
pinchando aquí) las cuales permiten adoptar una perspectiva más abierta respecto al potencial humano, sus motivaciones y capacidades. (i)
Para Seligman (2003), las emociones positivas pueden centrarse en el futuro, presente o pasado. Respecto al futuro, están el optimismo, la esperanza, la fe, y la confianza; las relacionadas con el presente son la alegría, la tranquilidad, el entusiasmo, la euforia, el placer y, la más importante, el llamado flow, o experiencia óptima, que incluye felicidad, competencia percibida e interés intrínseco por la actividad realizada (Csikszentmihalyi, 1990). Sobre el pasado, las emociones positivas incluyen la satisfacción, la complacencia, la realización personal, el orgullo y la serenidad. Estos tres aspectos emocionales son distintos y no se hallan necesariamente relacionados (Seligman&Csikszentmihalyi, 2000).
Las emociones positivas tienen un objetivo fundamental en la evolución, en cuanto amplían los recursos intelectuales, físicos y sociales de los individuos, los hacen más perdurables, y acrecientan las reservas a las que se puede recurrir cuando se presentan amenazas u oportunidades (Fredickson, 2001). Cuando las personas experimentan sentimientos positivos se modifican sus formas de pensamiento y acción (Seligman, 2005), se incrementan sus patrones para actuar en ciertas situaciones mediante la optimización de los propios recursos personales en el nivel físico, psicológico y social (Fredrickson, 2001).
Según Cicerón, «la gratitud no es solo la más grande de las virtudes, sino la madre de todas las demás.»
En un estudio de gratitud, realizado por Robert A. Emmons en la Universidad de California y su colega Mike McCullough en la Universidad de Miami, a los participantes, asignados al azar, se les dieron tres tareas distintas. Todos llevaban un diario semanal: un grupo describía las cosas por las que sentían agradecimiento, otro explicaba todo aquello que les fastidiaba y el último hacía un seguimiento de los eventos neutrales. Al cabo de diez semanas, los participantes en el grupo de gratitud se sentían un 25 por ciento mejor que los otros grupos, reportaron menos problemas de salud y rendían un promedio de 1,5 horas más. En un trabajo posterior de Emmons con una configuración similar, los participantes que completaron ejercicios de gratitud cada día ofrecieron a otras personas más apoyo emocional en su vida que los de otros grupos.
¿Cuáles son los beneficios de ser agradecido?
- Se experimenta con mayor frecuencia mayores niveles de emociones positivas, como la alegría, el entusiasmo, el amor, energía, optimismo, amabilidad y la empatía.
- Tiene una función protectora: potencia nuestra capacidad de gestionar el estrés, de resistencia frente a situaciones difíciles y de recuperarnos más rápidamente.
- Fomenta las relaciones positivas con los demás: su expresión también aumenta los sentimientos positivos y la sensación de reconocimiento de la persona que lo recibe.
- Disminuye la presión arterial y favorece un sistema inmunológico más fuerte.
- Genera mayor optimismo, felicidad y resiliencia.
- Facilita el dormir mejor
- Sentirse menos solo o aislado
- Mayor capacidad para ser generoso y compasivo.
- Ayuda a saborear las experiencias positivas de la vida.
- Refuerza nuestra autoestima y el amor propio.
- Tiende a inhibir las comparaciones envidiosas con los demás y a reducir o evitar sentimientos.
Entonces, si la gratitud es tan beneficiosa.
¿Qué puedo hacer para practicarla? A continuación te muestro algunas maneras:
- Cada mañana al levantarte, reserva un minuto para escribir dónde te gustaría centrar tu agradecimiento ese día (en que tienes un trabajo, una casa, una familia, amigos que te quieren, un desayuno rico, ropa para elegir, etc...) Después de eso, cierra los ojos y siéntate por un momento para enfocarse en esa cosa o persona de una manera positiva que genera una sensación de calor dentro. Ese sentimiento es gratitud, y una vez que lo sientas, respira profundamente y deja que se funda con tu conciencia.
- Por la noche anota en tu diario de gratitud tres cosas por las que sientes agradecimiento (3 cada día, ni más ni menos).
- Elogia a personas a las que no sueles alabar, descubre aspectos positivos de las personas que te rodean y céntrate en ellos. Seguro que los encuentras y díselo, con sinceridad por supuesto, sino no vale.
- Mira por la ventana, o sal a la calle, y encuentra algo que apreciar, como un árbol y sus formas, la lluvia mojando la tierra, la forma en que el sol se refleja en una superficie, un elemento arquitectónico de un edificio, una hoja caída, granos de arena en la playa, un gesto de amabilidad de tu vecino,etc.
- Ayuda a alguien a que focalice en los motivos de reconocimiento.
- Dile todos los días a tu pareja, a una persona amiga, a tus compañeras de trabajo, a tu hijo, etc. algo que aprecias de ellos.
- Antes de dormirte, piensa en algo que has hecho bien ese día o algo que te gusta de ti.
- Y por último, escribe una carta de agradecimiento a alguien que haya influido positivamente en tu vida y si puedes léesela, verás cómo te embarga una emoción plena que mejora tu bienestar.
Y si no te lo crees mira este vídeo:
En estas fechas y siempre, no olvides practicar la gratitud.
¡¡¡¡¡¡¡Es una habilidad que se puede entrenar. Esa es la gran noticia!
Y sí quieres profundizar en las emociones y en cómo gestionarlas, no te olvides que puedes contactar conmigo y te puedo acompañar como
coach y psicóloga.
Mil gracias por leer hasta el final.
¡¡¡¡¡Feliz vida ¡!!!!
Bibliografía:
(i) Françoise Contreras*; Gustavo Esguerra. Positive Psychology: A new perspective in psychology Universidad Santo Tomás.
(ii) Covadonga Chaves Alba Contreras Regina Espinosa Almudena Trucharte Carmen Valiente. Programa Felizmente: Facultad de Psicología.Universidad Complutense.